jueves, 7 de diciembre de 2017

My #nolost generation

Yo soy de la generación "perdida", sí.
La que ha aprendido a cenar sopas de sobre y a echar de menos las lentejas de su madre.
La que se ha acostumbrado al olor de los autobuses y aeropuertos, al sabor de los trenes cancelados.
La que es feliz al percatarse de que entiende una conversacion ajena en el metro o puede ver una pelicula entera sin subtítulos.
Yo soy de la generación perdida. La que metió su vida en una maleta dejando su armario vacio de ropa y lleno de incertidumbre.
Estoy segura de que tú, que sacaste un billete sin fecha de vuelta, sabes de lo que te hablo.
Yo soy de los que saben que una persiana vale más "de lo que vale un peine".
De los que no ven la tele mientras cenan porque miran la pantalla del ipad mientras hacen un.skype con los suyos.
De los de "is your accent coming from Spain? Oh, aren't you missing your sun?"
De los que sienten más frío en casa por tener a los suyos lejos que en la calle por estar a bajo cero en invierno.
Pero también soy de los que se hicieron fuertes y valientes.
De los que aprendieron a abrir más puertas de embarque que de habitaciones.
De los que saben lo que es una nochebuena sólo de dos y yéndose a dormir a las diez.
De los que crecieron más por dentro que por fuera, y con más dolor de  corazón que de rodillas.
Yo soy de la generación que tiene dos familias: la de casa, y la de "aquí".
De los que aprendieron a sentir de cerca estando lejos. De los que algún día volverán a por el sol de enero, pero de los que aún no saben cuándo.
Tu puedes llamarlo "generación perdida". Yo... yo soy incapaz de poner precio a todo lo que he ganado.

miércoles, 6 de enero de 2016

Hola 2016, vamos a recoger todo lo que sembramos!!

2016, tienes una misión.


Tendrás que traer contigo las sonrisas que 2015 se llevó, acercar a los que están lejos, devolver la inspiración a quienes la perdimos, y echar un chorrito de ginebra y fresa a la rutina.

Tendrás que hacer que florezca lo que sembramos, retumbar en el vacío y llenar cada eco con gritos de ganas.

Lo tienes difícil, pero tendrás que ser aquél del que todo el mundo habla, el de las oportunidades, el del cambio, el de "este año me voy a atrever aunque atreverme me lleve a mil kilómetros de aquí"... el de hacernos crecer cumpliendo sueños aunque seamos más de "descumplir" años.

Tendrás que ser el de hacernos grandes aunque duelan las rodillas, el de sentir de cerca aunque estemos lejos, el de las aventuras, el de los retos, el de no querer propósitos de año nuevo porque no necesitamos que sea 1 de enero para marcarnos un objetivo.

Tú tendrás que ser esa caña fresquita al sol de enero, mi canción favorita en bucle, el desayuno en la cama, esa oncita de chocolate de después de cenar, mi "andar bailando y conducir cantando".

2016, tienes una misión: serás aquél que cumpla mis sueños de despierta.

Y sé que puedes hacerlo.

Y confío en que lo harás.




Tu estarás siempre presente, 2015, por 
haber sido el año de las decisiones, de los puntos de inflexión, de los lados buenos de las cosas, del hacernos fuertes pero... 


...bienvenido, 2016, vamos a recoger todo cuanto sembramos.



Feliz año nuevo!!!

lunes, 13 de octubre de 2014

De esos que saltan por la ventana.

Hay amores.
Amores.. y amores de esos.

De esos que saltan por la ventana de la terracita de un apartamento para que no les veas ir a escondidas a comprar croissants de chocolate recién hechos.
Y café. Café caliente, porque el de la cafetera de goteo del hotel no te gusta.

De esos que te despiertan con un toc-toc en la ventana para que salgas a desayunar.
De esos que no tienes palabras para describir ni definir.



Si encuentras un amor de esos quédatelo. Quédatelo para toda la vida.
Cuídalo.
Mímale y demuéstrale que es lo más grande.
Sé tu también lo más grande.
Pero sobretodo nunca, nunca, nunca, le sueltes. Y no hagas que quiera soltarse.


Hay amores de esos..
De esos que saltan por la ventana.
De los valientes.
De los gigantes.
De los de para toda la vida.





Para ti. Feliz primer año de desayunos, besos de buenos días, y amaneceres con olor a café.

sábado, 8 de febrero de 2014

Baldosas amarillas


La Real Academia Española define la palabra “crisis” como (entre otras de sus acepciones): “situación de un asunto o proceso cuando está en duda la continuación, modificación o cese”.

Para mí, crisis es… oportunidad.

Una oportunidad disfrazada. 
Un tornado que arrasa con cada uno de los confundidos hasta dejarles tirados en cualquier infierno de lugar.
Un lobo con apariencia de caperucita que acaba con cada cosa que el débil posee.
Un tsunami. Un apagón. Un “no queda nada”. Un “the end”.

Pero no… espera, para. Lo estás haciendo mal. Lo estás mirando al revés.
Eso con lo que tropiezas no es un muro. Es… una escalera. Sólo tienes que saber de dónde sacar la fuerza para subir el peldaño que tienes delante.




Conste que no hablo sólo a nivel económico. 
Una crisis, cualquier crisis, es una oportunidad para avanzar. Para creer y crear cambiando sólo una minúscula, para resurgir de las cenizas, para inventar y reinventar (-se).
Una crisis es… CRECER. Y crecer, señores, duele. ¿O es que sus rodillas nunca se quejaron?


Crisis es fuerza, es proyecto, es futuro.

Nos pasamos la vida labrándonos un porvenir, y no nos damos cuenta de que el futuro no existe, que es mentira, son los padres… 
que el futuro es presente, y que el presente es hoy. Que “si miras atrás, mañana es hoy”.

Tenemos que pelear por un “presente” mejor, por un “buen presente”, para que en el presente del futuro podamos estar orgullosos de nuestro pasado, recojamos los frutos de aquel esfuerzo… nos riamos del agobio de aquel ayer que ahora es hoy.

Una crisis es una oportunidad disfrazada de valor. Valor para hacer cosas que jamás creíste que harías. Valor para dibujar un sueño. Valor para limar tu creatividad, para romper un mito, para hacerte fuerte.

Una crisis es una oportunidad disfrazada de canción. Y “que ser valiente no salga tan caro”. Y “que ser cobarde no valga la pena”.

Ahora que ya sabes lo que es, sólo te queda una cosa: seguir el camino de baldosas amarillas. Es la mejor alternativa ante perderse en el tornado.



Y recuerda lo que siempre te digo: al genio, antes que genio, le llamaron loco.




jueves, 26 de septiembre de 2013

De utopías y muñecas; sillas, piernas y esperanzas.

Aquélla niña no había dejado de llorar. Llevaba llorando una eternidad escondida debajo del tobogán, desconsolada, con el corazón encogido.

-Mamá, por qué crees que llora esa niña?
-No lo sé cariño, quizás podrías acercarte y preguntarle. A lo mejor le hace feliz y se le pasa.



-Hola!
-Hola..
-Por qué estás llorando?? Llevas llorando mucho rato, y si no lloras por algo por lo que tengas que llorar de verdad, se te van a secar los ojos, te vas a quedar sin lágrimas, y no vas a poder utilizarlas cuando las necesites.
-Mi mamá me ha dicho que va a llamar a los Reyes Magos para que vengan a recoger todos los juguetes que me dejaron, porque me he portado mal.
-Y qué has hecho?
-He roto mi muñeca nueva.
-Y por qué la has roto? Ya no te gustaba?
-Sí, es mi muñeca favorita.
-Entonces?
-Ella no necesitaba las dos, yo podía ayudarle a caminar y pasear a su perro, así que le he roto una pierna.
-Y por qué has hecho eso? No es más bonita tu muñeca con las dos piernas?
-Para mí sigue siendo igual de bonita, pero yo quería hacer un regalo a mi nueva amiga del cole.
-Y qué querías regalarle?
-La pierna. Ella va subida siempre en una silla, y no tiene a nadie que la empuje cuando todos jugamos en el patio. Yo puedo empujar a mi muñeca y así no necesita sus dos piernas.
-Y por qué tu amiguita va subida en una silla?
-Cuando le hice esa pregunta me contestó que, igual que yo usaba gafas, ella usaba silla.
-Pero tú usas gafas porque tendrás los ojos "malitos", no?
-Así es. Y ella tenía una pierna muy malita, y ahora sólo le queda la otra.
Y yo sólo quería que jugase conmigo sin que nadie la tuviese que empujar..
-Si algún día la traes al parque, yo la empujaré contigo.


Y así, sin más, la niña dejó de llorar, y la vida le dio una lección.

martes, 6 de agosto de 2013

El día que hacía más viento que nunca..

"A mí no me cuesta darte besos sólo a ti. No me cuesta. No es un esfuerzo. Lo hago porque quiero."

Eso fue de lo más bonito que le habían dicho nunca. No sabe si por simple o por sincero..
pero se le había quedado grabado.

Y así sin más, se dio la vuelta, le dio un abrazo fuerte fuerte, y se fue.
Para siempre. Era su despedida.
Con un nudo en la garganta que no tuvo que explicar (porque nadie lo veía), y una lágrima revoltosa en su mejilla derecha, que dijo, "sólo era culpa del viento."


Pues ese fue el día. El día que hizo más viento que nunca...










Mientras tanto suena "El día que hizo más viento que nunca" (como no), de Carlos Sadness.

miércoles, 31 de julio de 2013

Que te grito y no me ves; que te escribo y no me escuchas.

El día que te dé por salir del escondite ese en el que te cobijas, ese día, te va a caer una buena.

Quizás lo hagas de un modo inesperado, pero entonces no te reconoceré cuando llegues, porque estoy esperándote.

El día que cruces mi ventana con un "salta, valiente!", haré una bola con tu avión de papel y te la tiraré a la cara, enfadada.

No te estás dando cuenta de que llegas tarde??

Que me estoy cansando de mirar la lavadora. Que no quiero tener que inventarte.


Date prisa.. o no podré abrazarte cuando vengas.





Mientras tanto suena: "Siempre esperándote", de Carlos Sadness con Iván Ferreiro.
http://www.youtube.com/watch?v=AAHnnyZDVT8

lunes, 1 de julio de 2013

Olvidarte nunca. Quererte siempre.

Que sí! Que sí! Que ya sé que dije que te llamaría y no lo hice.. Me perdonas? Me perdonas? Me perdonas?
Jolín.. no te enfades!! Ya sabes que soy un desastre, y que últimamente no tengo mucho tiempo libre..

Lo sé, no te estoy dejando hablar!! No me conoces?? Ya me caaaaallo, ya te escuuuuucho!!

Cuándo te veo? Venga, que tengo ganas de tomarme un batido de chocolate gigante contigo, de esos de los de repetir y pasarnos toda la tarde sentados en el paseo y poniéndonos al día de nuestras vidas!!

Yo sigo casi como la última vez que hablamos.. Abandoné mi último proyecto y encontré un nuevo trabajo. Bueno, quizás no sea el trabajo de mi vida por ahora, pero tal y como están las cosas, me ha ayudado a cambiar la perspectiva y quedarme con el "trabajar para vivir", así que estoy contenta, porque me estoy dando algunos caprichitos de los que tenía ganas y estoy aprendiendo a valorar muchas de las cosas que nunca tuve en cuenta.

Y tú qué tal por allí? Sigues en el mismo sitio? Cómo te tratan? Seguro que tienes encantado a todo el mundo!!

Ay, perdón!! Otra vez!! Que sí, que sí, que te dejo hablar!! Venga, cuéntame!!

...

Oye...?? Hola...??

Mierda!! Se ha cortado!! Voy a volverle a llamar, que total, para una vez al año que lo hago, al final hasta se enfadará conmigo!!

(Nueve "bip" del teclado a la par que marca su número de teléfono y una voz de teleoperadora artificial le devuelve a la realidad: "El teléfono marcado no corresponde a ninguno de nuestros clientes")






Ya sabes cómo soy cuándo me embalo y empiezo a hablar nerviosa y sin parar.. que no escucho, que no tengo noción de tiempo ni distancia, que no sé si me estoy yendo por las ramas o si lo que digo no tiene ningún sentido...
Ya sabes cómo soy cuando me embalo y empiezo a hablar nerviosa y sin parar... que casi no distingo a quien tengo delante.





Nueve años después la vida no ha cambiado demasiado.

Olvidarte nunca.
Quererte siempre.


jueves, 20 de junio de 2013

Desgracias, Fortunas y Desperados.

Que tú no te vas a enamorar. Que no. Que tú no. Que no te enteras. Que no es por hoy. Que es por nunca, que es por siempre...
que será así siempre.

Que quieres y lo intentas.
Que das, das, das...
Que subes y subes y subes.. y bajas. Y otra vez subes y subes y subes.. y sigues subiendo.

Que imaginas, que sueñas, que adornas.. caminas.

Que despiertas, que añoras, te largas.. esquivas.

Que vuelves a subir.

Y bajas.

ysubesysubesysubesy.. fuuuum!! Al suelo, de golpe.

Que no sabes, que no puedes..

que no. Que tú no.

Que tú no te vas a enamorar...

...

Hasta que llegue el día en que, sin darte cuenta, lo hagas.






















Este te lo regalo. 
Para tí para siempre, porque lleva tu nombre. 
Por todas esas confesiones entre desgracias, Fortunas, y Desperados.








Dibujo by Patrisue. Gran artista , gran crítica, y gran amiga.



domingo, 9 de junio de 2013

De relojes de arena e incendios no extinguidos..

Cuando quiso darse cuenta se había hecho demasiado tarde.
Era de noche y llovía a cántaros en pleno verano. 
Una lluvia de esas en que estar 30 segundos al descubierto tenía el mismo efecto que darse un baño nocturno en la piscina de la urbanización.



El reloj de arena se había dado tanta prisa al dibujar la montaña en su parte de abajo, que no le había dejado reaccionar.


Se acordaba de él todos los días.
Aquél, más aún, pues era su cumpleaños y todavía le faltaba valentía para coger el teléfono y llamarle.



Y en ese momento fue consciente de que se arrepentiría cada día de su vida de no haberle dado todos los besos que quiso, de no demostrarle cada cosa que sintió, de no luchar por aquéllo que tenían y que ardía cada vez que se rozaban..

Y en ese momento fue consciente de que se arrepentiría cada día de su vida, porque ya, con nadie más, ningún día de esa vida sería igual.




Nunca estuvo en mis manos pero siempre estuvo en mis planes.



domingo, 2 de junio de 2013

El día que descubriste que te faltaban las ganas.

Cuando te falten las ganas pregúntate cómo acabaste allí, qué te llevó hasta allí.

Pregúntate si estás ahí sentado porque quieres, o porque no sabes de qué manera coger la puerta e irte.

Cuando te falten las ganas no digas nada a nadie, calla, otorga... túmbate contigo y discute con tu Yo del futuro.

Pelea, planea, analiza, descubre... pero disimula. Ante todo disimula.. que nadie debe notar que te faltan las ganas, porque entonces créeme, es mucho peor... Para todo.

Si quieres dejar algo, hazlo. 
Si lo que tienes no te gusta, dilo. 
Si no vas a aguantar hasta mañana, no esperes. 
Si vas a cambiar de rumbo, despídete. 
Si vas a seguir ahí, despista... pero espabila; espabila a pasos agigantados.

No controles, nadie lo hace. 
No abandones mientras te quede la mínima duda de que merece la pena.
No des de ti menos de ese 80% tuyo.
No salgas por la puerta de atrás creyendo que no va a enterarse.

Sólo hay dos cosas que puedes hacer cuando te falten las ganas: buscarlas, o salir corriendo... pitando, sin esperar a que te echen.

Porque las ganas sólo faltan porque te falta algo más grande: motivación, deseo, emoción... tripa. 

Las ganas sólo faltan cuando te falla la tripa, y si te falla la tripa... sal de ahí, porque entonces sí: estás perdido.




Y el día que descubriste que te faltaban las ganas lo descubrí yo también... 
pero no te dije nada.









De noches de insomnio y vagabundos recuerdos


Ya no había nadie a las puertas de aquel cielo. Nadie que le dijese lo que estaba y no estaba bien, lo que era o lo que dejaba de ser.

Hacía tiempo que había aprendido la lección, que sabía de pé a pá cuál era exactamente toda su teoría, a pesar de que nunca supo aplicarla.

Aquélla noche de insomnio se asomó a la ventana, con el único objetivo de mirar los coches que pasaban embalados por la carretera, sin prisa, sin frenar, sin importar si el semáforo era verde o “verde oscuro”, porque nunca se paraban.


Aquélla noche de insomnio, aún no sabe bien por qué, se acordó de él. Le veía cada mañana al llegar al gimnasio. Dormía entre tres o cuatro mantas, y tenía sus más preciados tesoros al cobijo de su almohada: un libro de Pablo Neruda, un cenicero, una radio y unos cascos, tabaco de liar y una botella de Coca-Cola.

Cuando ella salía después de su clase le encontraba barriendo su metro cuadrado, o volviendo de lavarse la cara en el baño del instituto público que había a su espalda.
A menudo se atontaba mirándole con disimulo, por el rabillo del ojo, mientras ataba su bici en aquéllos hierros que él utilizaba para protegerse; y se preguntaba qué desgracia de tal magnitud pudo sucederle para terminar allí, para terminar así.

Tras días y meses de encuentros y miradas, y algún que otro “hasta luego”, se armó de valor para llevarle un par de botellas de su bebida favorita, un pack de latas de atún y un paquete de pan de molde que había ido a comprarle la tarde anterior.
Pero cuál fue su sorpresa cuando, al llegar aquélla mañana en que el aire ya era fresco, él no ocupaba su metro cuadrado de asfalto, sus cosas no estaban, sus mantas… tampoco.

Pasaron los meses de invierno y de frío y le recordó cada mañana al atar allí su bici, preguntándose a sí misma qué habría sido de aquél anciano guardián de tesoros. Habría encontrado una vida mejor? Le habrían agredido? Habría muerto? Se habría mudado? …
Algunas de las posibilidades le desgarraban el alma y otras, sin embargo, la hacían sonreír.

Y cada día tenía la esperanza de que, con la llegada del buen tiempo, él volviese allí a dormir, y comprobar que estaba sano y salvo, y atreverse a preguntarle por su historia, y llevarle el pan de molde, el atún y la coca cola que volvería a comprarle la tarde anterior para alegrar su mañana.

Y cada día tenía la esperanza de que, con la llegada del buen tiempo, él cruzase su mirada con ella entre la gente, camuflado entre la muchedumbre, vestido con ropa y no harapos y cargado con algo que no fuesen sus mantas… porque en el fondo, ella sólo deseaba que él hubiese pasado a “mejor vida”… que hubiese dormido en una cama.







Mientras tanto suena "Las Noches de Insomnio", Niños Mutantes.


jueves, 18 de abril de 2013

Historia de un francotirador.

Era en plena primavera y yo, que siempre preferí disparar, me había quedado sin balas... Por ahora.


Sé que no lo entenderás.
Tampoco importa que lo hagas.
No esperaba que lo hicieras...





















Mientras tanto suena: "Disparé", Nena Daconte.

jueves, 11 de abril de 2013

El regalo más grande... eres TÚ.


Todos coincidiréis conmigo en que tenéis la mejor madre del mundo, pero la mía…
A la mía le costé 24 horas de parto y aun así me quiere!! Decidme a mi si eso es o no una MADRE!!

Mi madre es capaz de teletransportarse en milésimas de segundo cada vez que la necesito. Mi madre es taxista, lavandera, cocinera, psicóloga, madre y amiga. 
Que sí, que sí, que eso lo son todas pero... 
no sé cuántas veces me ha recogido en una discoteca siendo adolescente rebelde; ha dormido en mi cama cada vez que he llorado sin parar hasta no poder ni abrir los ojos; se ha quedado despierta en mi cama cada vez que he llorado sin parar hasta quedarme dormida; si tenía hambre, ella preparaba la cena aunque llegase cien veces más cansada que yo; si me enamoraba se enamoraba conmigo; si me rompían el corazón le dolía a ella casi más que a mí; si iba fea… me lo decía (sí, mi madre es muy buena madre, pero a veces se pasa).

Nunca me faltó nada que ella pudiese darme.

Se hartó de correr detrás de mí por el pasillo zapatilla en mano, me soltó algún merecido guantazo, pero nunca se le acabaron los abrazos ni los besos.

Le puedo sisar su crema más cara, que refunfuña, pero acaba por dármela.

A veces es pesada, pero bueno, ¿qué madre no lo es?

Y así podría estar haciendo durante mil horas una lista de mil cosas que hacen que para mí mi madre sea lo más GRANDE del mundo, pero yo, que no soy tan buena hija, tengo que salir pitando a última hora a comprarle su regalo.

Aun así… Sabes que TE QUIERO, MAMÁ, y sólo con ser para mis hijos algún día la mitad de lo que tú has sido siempre para mí podré estar orgullosa.

FELIZ CUMPLEAÑOS.


jueves, 21 de marzo de 2013

Cafés en vena y calcetines sin pareja..

-"Coge el teléfono, coge el teléfono, coge el teléfono.." piensa Alice a cada tono que escucha.

-Diga?

-Por fin tía!! Me estaba muriendo ya con el puto tonito en espera de Lady Gaga.

Penny se ríe a carcajada limpia como siempre suele hacer y, contenta, responde. 
-Qué pasa tía? Qué es eso tan urgente que no puede esperar a un café calentito?

-He hablado con él!! Por fin he hablado con él!! Y muy seriamente. Le he echado valor, le he llamado, y le he soltado toda la mierda que tenía que soltarle si no quería reventar.

-Y bien?

-Ya está, por fin. Me libero. Hoy ha sido el primer día que he creído empezar a conocerle, aunque ya haya sido tarde.
¿Sabes esas personas que están locas pero que dicen ser bipolares porque ahora es lo que está de moda? Bueno, pues no es su caso. Yo creía que sí, pero no es su caso.

Después de monopolizar la conversación y soltarle un speech de media hora, él sólo ha sabido callarse y contestar "no sé". Y sabes? Ahí lo he visto claro.

No está loco, ni es bipolar, ni está hecho un lío. Es algo tan sencillo como el miedo. Tiene miedo..

Sabes esas personas que asumen un rol y se esconden tras una barrera para que nadie, nadie, nadie les haga daño?? Et voilà!! Él es una de esas personas. 
Algún día, en algún momento, no sé cómo ni por qué, tuvo que cambiar su corazón por un trozo de hojalata, y eso es todo lo que le pasa.
Predica que no cree en el amor, que no se enamorará nunca y que no quiere una relación seria. Sin embargo, en la soledad de su cuarto sueña con el compromiso, con estabilizarse y con dejar de dar bandazos de un lado para otro.

-Vale, vale, vale, frena Alice!! De dónde coño te has sacado toda esa parafernalia? Entiendo que tengas que montarte una película de arcoiris y osos amorosos para sufrir menos pero.. no es más fácil asumir la realidad y enfrentarse al hecho de que no te quiere?? Qué te hace pensar que es tan indefenso??

-Penny, una persona a la que le gusta derretir el helado en el microondas, ver pelis a la hora de la siesta, dejar las galletas en la leche hasta que se ponen blanditas, y que usa un calcetín de cada color cuando no encuentra la pareja del par que le falta... una persona así es, por definición, indefensa.

-Tú no estás bien.. Te has tomado la medicación??

-Anda tía!! Déjate de bromas jolín!! 
Yo no quiero nada con él.. Ya no. Ni siquiera me duele que pase de mí, porque nunca me planteé nada más.. Pero por fin he descubierto que ese tipo de gente existe. Que disparar a los enamorados y odiar a los vomita-arcoiris sucede por una razón.. No es que sea como nos vende que es cuando nos dibuja esa forma de ser de "paso de ennoviarme/no me creo nada de vuestros mundos rosas". Simplemente... se protege.

-Y no puede ser sólo que sea exigente consigo mismo y no quiera conformarse con cualquiera que no le llene?

-Puede, no sé.. Pero eso no quita el hecho de que tenga miedo.
Sabes? He tenido una idea! Voy a hacerme su amiga! Creo que nos esperan tardes enteras de charlas interesantísimas e interminables.

-Tú no estás bien... No lo estás. Se te va la olla!! 
En fin... quizás por eso te quiero tanto.

-Y yo a ti, bonita. Te veo luego.

-Donde siempre?

-Sí, trae chuches... y café.







Y mientras tanto suena: "Cualquier otra parte", de Dorian... como no.

jueves, 14 de febrero de 2013

"Amor y otros desastres"

Hace tiempo que tengo este post en borradores, y no se me ocurre día mejor que hoy para publicarlo.

Nunca nada me pareció tan divertido como crear un rol, inventar un personaje y mantenerle al otro lado del teclado.
Podrás creer que me conoces y no tendrás ni la más remota idea. Podrás creer que creo historias o que cuento realidades. Podrás que creer que creo en el amor o que soy una asesina de cupidos... 

En cualquier caso, y enamorada o no, ahí os dejo el que es, para mí, uno de los mejores diálogos de esta peli con la que creo que todos seríamos capaces de identificarnos en más de una etapa de nuestras vidas:








Peter: Te has planteado que el amor verdadero pueda ser una conspiración?

Jacks: ¿Una conspiración?
Peter: Sí. Una conspiración capitalista, una mentira urdida por la industria del cine, la publicidad y la música; todos vendiéndonos humo, un concepto que ni siquiera existe.
Jacks: ¿Que el amor verdadero no existe?!
Peter: Piénsalo bien. ¿Dónde está si no es en canciones, libros o películas? ¿Quién puede decir sinceramente "Siempre te querré"?
Jacks: Whitney Houston!!
Peter: Sí, cuando va puesta de crack. La cuestión es que la gente se deprime porque busca esa cosa inexistente o lo hace igualmente porque cree que se ha conformado con menos.
Jacks: Yo no estoy deprimida y creo en el amor verdadero.
Peter: Sí, por eso sigues acostándote con tu ex-novio.
Jacks: Ponen "Desayuno con Diamantes", la vemos?
Peter: No me escuchas?? Te estoy diciendo que las películas han suprimido mi capacidad de amar...


He aquí la prueba de que hay más gente que cree que el amor está sobrevalorado. Es mi escena preferida de "Amor y otros desastres", una reflexión sobre la confrontación entre el amor verdadero y el amor de película.

¿Y si el amor verdadero es simplemente un proceso? Un "algo" a lo que hay que dar la oportunidad?
¿Cuántas personas se soportan hoy en día durante el resto de sus vidas? 
¿Cuántas relaciones son tan perfectas como se nos vende en las novelas rosas y las comedias románticas?
¿Debemos exigirnos menos? ¿Esperar menos de nuestras relaciones? 
¿Existe ese amor fuerte, grande, azul...? O es sólo una etapa, un período efímero que tiene fecha de caducidad?

Al principio de una relación el cerebro se sobrecarga de reacciones químicas que lo desbordan... que nos quitan el sueño, el hambre, que nos hacen ver todo el mundo que nos rodea de color de rosa y con toboganes de arcoiris y osos amorosos (puaaagggg)... Y eso cuánto dura?
Qué es enamorarse? Es tener todos esos síntomas? ¿O no tiene nada que ver con todo eso y se simplifica en querer tener a tu lado a esa persona que te complementa y completa, que te hace sentir especial? Porque a ver... Especiales lo que se dice especiales, puede hacernos sentir mucha gente a lo largo de nuestra vida y no por ello nos enamoran...

También puede ocurrir que al principio de una relación, y aunque el cerebro se sobrecargue de todas esas reacciones químicas inexplicables desde mi modesto conocimiento, nosotros mismos nos frenemos por miedo... Miedo a qué? A estamparse? Sí, supongo que sí... 

Entonces...? Qué mierdas es el amor? A ver... ¿Es encontrar una persona que cumpla con los requisitos que tú estableces para el compañero perfecto de vida? 
¿Es encontrar una persona que no los cumpla pero que te haga sentir que estás en una montaña rusa? Porque recuerda que eso es humo... boom! Se esfuma, se va...
Supongo que es encontrar una persona que reúna esas dos cosas, y encontrarla en el momento adecuado.
¿Siempre hay uno de los dos en una relación que se conforma? Que empieza sin estar convencido y se deja ganar con el tiempo? Porque si es así... vaya farsa!! O sea, que el que se conforma no tiene derecho a sentirse consquistador y triunfador por tener exactamente lo que quiere, como es el caso de la otra parte?
Aaaahhh, ya, ya, ya.. Es que el amor consiste en que los dos se quieran y se adoren y crean que son maravillosos el uno para el otro y tengan mariposas en la tripa a la vez y desde el mismo momento... Claaaro... -.-'

Creo que se pierden los valores, que ya nada es como era, que nadie aguanta todo y todos saltamos por nada... Y así pasa, que la vida va deprisa, que se cambia de fondo de armario, de música, de móvil y de pareja a una velocidad que el mundo no sé si puede o está preparado para soportar...

¿Estamos destinados a conformarnos? A acostumbrarnos? ¿A enamorarnos y desenamorarnos? ¿A ser unos "asesinos de cupidos"?

No... en el fondo sé que no... Y estaremos a salvo siempre que nos sigan temblando las piernas y sigamos buscando unos ojos concretos en todas las miradas...

Eso, eso sí es amor, saber que no es perfecto, saber que habrá mil baches a lo largo del camino, hacer el esfuerzo, reflexionar, encontrarse a sí mismo, "limpiarse" por dentro, centrarse... frenar.

Sí, eso es... FRENAR.

domingo, 10 de febrero de 2013

Te prefiero así..

Prefiero el mar a la montaña, el color al blanco y negro,  esperarte a que me esperes.

Prefiero el sol a la sombra, el chocolate sin leche y los viajes de noche.

Que conduzcas y me lleves, la moto antes que el coche y el café: solo y sin azúcar.

Prefiero olvidarte a que me olvides. O no.. quizás no.

Prefiero un abrazo fuerte fuerte a un beso vacío, una casa con jardín a un piso de ciudad, un perro más que un gato, pero eso sí, no mi gato.

Pedalear a andar, y nadar antes que nada.

Me gustan los juegos de palabras, bailar con las letras y sumar cada matrícula en los coches.


Que te rías conmigo a reírme de ti.

Echar de más a echar de menos.


Coca cola light sin hielo en el burguer, con hielo y limón en el bar, en bote y no en botella.

Prefiero un susurro a un grito, el desayuno a la merienda, irme a que te vayas.


Cerveza fría al sol de enero antes que una discoteca.

La música al ruido, el dulce al salado, lo amargo: siempre.


La comedia al drama, la siesta en el sofá, y el sueño... en la cama.

Prefiero escribir a hablar, comer: a todas horas, dormir si aún no es de día.

Madrugar trasnochando pero sin tener sueño. Y la persiana? Subida para verte en la ventana.


Prefiero lo cercano a la distancia, la diversión al miedo, el medio lleno envasado al vacío.

Que me conozcas a que me leas; que me estudies a que me ignores; que me escribas tú primero.


Las tormentas desde el sofá, y debajo de la manta. La lluvia en el cristal pero no en las pestañas. El frío sólo desde lejos.

Un libro a una revista, la locura a la cordura, inventarte a que me inventes. 


"Prefiero salir a ganar que quitarme de enmedio"

Te prefiero así, difícil, raro, extraño... hasta que por difícil, raro y extraño deje de preferirte.


Prefiero ser a parecer, soñar a despertar, vivir a que me cuenten.

Prefiero mis dos puntos suspensivos a los tres de todo el mundo..



Me acusaste de esconderme detrás de tres relatos, de no conocerme demasiado; me pediste que escribiese algo real. 

Aquí lo tienes. Aquí me tienes. O no... quizás no.








martes, 5 de febrero de 2013

"Vidas que dejé cruzadas.."

Existes. Existes y lo sé. Ya no tengo que inventarte, sólo tengo que esperar a que tú mismo te des cuenta.

Toda la vida imaginando la cara que tendría mi príncipe azul desteñido y de repente un día, zas! Lo averiguo así, sin más, porque sí, porque una sensación me lo ha chivado.

Soy exactamente lo que necesitas. Eres exactamente lo que necesito yo. Pero, sabes? Aún no me conoces, o al menos no del todo.
Aún no sabes que estoy aquí, que te espero. 
Aún no se te ha pasado por la cabeza que soy yo.. Bueno sí, te lo has planteado, pero demasiado fugazmente, y no te has atrevido ni a decirlo en voz alta por si te oyen las paredes; y tienes miedo, y estás perdido, y no es tu momento.

¿Que por qué lo sé? Porque a mí me ha pasado exactamente lo mismo contigo. 



Y con este último pensamiento apagó la luz de la mesita y se dispuso a soñar. Tranquila, porque sabía que el Universo tenía su plan, y que no importaba cuánto tardara en llevarse a cabo, porque él era para ella y ya podía dejar de buscar sus ojos en cada mirada.
Quizás no tenía lo que siempre imaginó, pero alguna extraña sensación le decía que ya le había encontrado.




Y mientras cada cual repartía sus besos, seguía sus pasos y vivía su vida, ella esperaría sin impaciencia el momento en que el mundo le cruzase en su camino, porque estaba segura de que tropezarían algún día.. 

Cuando los dos estuviesen preparados. 

Cuando ya nunca volasen por Universos paralelos.

Cuando ya nunca se perdiesen.



domingo, 13 de enero de 2013

Hoy, en relatos de historias robadas: "El efecto cuchara."

-Y qué pasó? Cuéntamelo todo!!

-Nada. Finiquitado tía. Se acabó, ahora sí que se acabó.

-Bah, tú siempre dices lo mismo y luego vuelves a caer...

-Lo sé, pero esta vez es distinto, sabes? Vino aquí y, antes de llegar, yo ya sabía que no iba a volver, que no quería que volviese.

-Y eso?

-Detalles... Pequeñas cosas que marcan grandes diferencias. Yo tenía claro que sólo quería decirle adiós en condiciones, despedirme. Y él... a él simplemente le da igual. Le da siempre todo igual.
¿Sabes esas personas frías, inexpresivas, que construyen barreras de cemento delante de tus narices? ¿Esas personas incomprensibles, que no se dejan entender, que no se abren...? ¿Esas personas a las que es imposible "invadir" ni compartir su espacio vital? Bien, pues él es una de esas personas. Es imposible saber qué piensa, qué siente, qué adora y qué odia, qué detesta y qué le encanta...
Y además es.. es.. un bipolar diagnosticado. Aunque yo le llamaría tripolar, porque es mucho más desconcertante si cabe. ¿Recuerdas aquéllo de los velocirraptores? Pues eso.

-Uff, yo conozco alguno así también... Demasiado difícil... hasta para quienes adoran los retos.

-Lo sé...

-Entonces, ¿desistes? ¿Sólo por eso?

-Sí. Todo tiene un límite, luchar por él también. De repente, no sé... me dejó de apetecer.

Es el efecto cuchara, sabes? No es el efecto cuchara del fregadero, ese por el que, cada vez que friegas los platos, el chorro del grifo va directo a la cucharilla, esté donde esté, y te salpica entera... No, ese no. Es otro efecto cuchara. Tienes un plato gigante de arroz al horno delante, arroz al horno del de tu madre, de ese casero que te ha preparado con el caldo del cocido del día anterior, no de ese precocinado que no sabe a nada... Tú siempre te lo comes con tenedor, pero ese día tiene tan buena pinta que coges la cuchara (que cabe más) y la llenas hasta arriba, la miras salivando, a lo Homer Simpson, te la metes en la boca y... zas!! Te atragantas!! Un grano de arroz se te va por el otro lado, bebes agua, empiezas a toser, te cuesta respirar y... adiós a tu plato preferido de la semana, te ha dejado de apetecer. Pues esto es igual. Se me atragantó, tía, me dejó de apetecer.

-Pero no lo entiendo... si te encantaba!

-Sí, pero la gente te encanta por unas cosas concretas, y si desaparecen esas cosas... apaga y vámonos. Volvemos a lo mismo, las relaciones-contratos. Si no vas a darme lo que yo necesito... Lo siento, pero no firmo.

-Uff, qué complicado es todo...

-Qué va!! No es complicado!! La gente se empeña en complicarlo... Yo, simplemente, me equivoqué de tío. 
Puedes ser el más guapo del mundo por fuera, que si no me haces sentir la más guapa del universo por dentro... no me vales.

-Bueno tía, por lo menos no era tan tonto como el último ligue de Celia.

-Celia? Qué pasa con el último ligue de Celia?

-Pues va el tío y queda con ella el fin de semana, como de costumbre, y se presenta con un chupetón gigante en el cuello que vaya tela... para haberle succionado hasta la aorta!! Vamos, para matarlo...

-En serio?!? 

-Como te lo cuento!! Y cuando se percató de que se lo había visto, le cuenta que se lo hizo su amigo en una discoteca... con 30 años!! Pero a ti te parece normal??

-Jajajaja. Bueno, normal lo que se dice normal... muy normal no es. 
Y qué pretendía?? Madre mía.. no sé si es más tonto por presentarse con el cuello como si le hubiese atacado un Cullen, o por pensar que ella se iba a creer esa historia... Pero por favor!! Todavía queda gente así por el mundo??

-Pues parece ser que sí, así que mira... aún habrás tenido suerte con tu sapo!! Pero a ver, volviendo a lo tuyo, entonces, ¿qué pasó?

-Nada tía, si es que no pasó nada, simplemente.. c'est fini por parte de los dos, porque a él tampoco le ha importado que yo haya desaparecido del mapa.
Supongo que es el tercero de los efectos cuchara.

-Sorpréndeme!

-A tí te gusta dormir en 44? Haciendo "la cucharita"? 
Por lo general a nosotras nos encanta.. dormir abrazados, calentitos, vomitar arco iris, ooohhh... Todas esas moñerías.
Y para ellos se traduce en comerse tu melena, que le haga cosquillas tu pelo, que se les duerma el brazo...
Pues vale tío, no me hagas "la cuchara" durante toda la noche, pero haz un esfuerzo por abrazarme hasta que me quede dormida!! Que no cuesta tanto!!



Así que llegué a una conclusión: no pensaba estar con alguien que sólo venía a calentar su lado de la cama y salir de puntillas cada mañana por la puerta de atrás sin decir casi ni adiós. No pensaba conformarme con un amigo con derecho a roce y sin derecho a sentimientos. No pensaba contentarme con su "nada" dosificado en raciones de "viernes".. Que no es que quiera una relación seria ya, casarme y tener hijos pero coño.. un poquito de cariño? Un mínimo de aprecio? Que estamos compartiendo lo más íntimo que hay, joder, es que es de cajón... Que no, que no se puede ser tan frío tía, que paso.

Así que mi próxima rana sólo tendrá un requisito que cumplir, y se lo dejaré bien claro: "No te quedes si no piensas dormir abrazado a mi toda la noche. No me pidas que me quede si no piensas en que duerma abrazada a ti toda la noche". 

Y es que si hago memoria, sólo quien mereció la pena, supo cumplir con su efecto cuchara.









Y después de esto tú me preguntarás que qué pasa y yo te diré que nada, aunque en realidad quiera contarte todo. Y te irás otra vez sin despedirte, pero yo ya no saldré de la cama.
Y no volverás nunca...

Y odiaré de por vida esos olores que llevan tu cara dibujada... hasta que te pierdas con ellos en el aire.



lunes, 31 de diciembre de 2012

Y multiplicar las sonrisas de 2012, como mínimo, por 13..


Último día del año.

No sé por qué la gente se empeña en pensar que las cosas cambiarán de un día para otro sólo porque cambiemos de número.
Hacemos balance, nos marcamos metas y propósitos, y estipulamos las nuevas reglas de otro juego pero… lo más importante… hay que cumplirlas, señores. Y es que no basta sólo con proponérselo, aunque ya sea un gran paso.




Hace unos años alguien me enseñó el concepto de “foto bonita”. Alguna vez hablé de él, pero para quienes no sepáis a qué me refiero, os contaré que todos tenemos una.
Tu “foto bonita” es esa imagen que te gustaría ver en un futuro, ese lugar en que querrías estar, ese sueño que querrías cumplir, eso en lo que te gustaría verte convertido. Un objetivo. Una meta. Un logro. Una realización. Un todo.
Ahora que acaba el año es un buen momento para hacer nuestra “foto bonita” y empezar a emprender el camino hasta ella.
Yo tengo muchas “fotos bonitas”, y no espero al 31 de diciembre para disparar ni al 1 de enero para intentar revelarlas. A veces salen mal, pero otras son dignas de tenerlas enmarcadas y presentes toda la vida.

Como todo el mundo, también tengo mis propósitos para el año nuevo. El más importante, y en el que se basa todo diría que es “Multiplicar las sonrisas de 2012, como mínimo, por 13”.
No sé si será cosa de gatos o de libélulas, pero el privilegio del positivismo no lo cambio por nada del mundo. El truco? Es sencillo.. y es que no lo estás viendo bien, gira el caleidoscopio, corre, deprisa! Y date cuenta de que eso contra lo que chocas no es una pared, es un peldaño. Ahora sólo tienes que subirlo. Y así toda tu escalera.

En 2013 haré puenting, borraré dos de los puntos suspensivos de cada historia que no quiera, desecharé cada cosa que no aporte algo bueno a mi vida, iré a NY, terminaré de leer cada libro que empiece aunque no me guste, exprimiré a cada persona nueva que entre a formar parte de mi mundo, echaré a quienes no se dejan exprimir y reexprimiré a quienes ya están en él.

Cerraré las puertas por las que me entre frío y abriré las ventanas por las que entra el sol. Seguiré escuchando música a todo volumen y bailando en la ducha como una loca, y no dejaré de cantar en los semáforos aunque el del coche de al lado me mire y se ría.

Escribiré lo que me apetezca cuando me apetezca. Pensaré antes de hablar en ocasiones, y en otras hablaré sin más.

Me sobrarás más que me faltarás.

No trataré como prioridad a quien me trate como opción. No trataré como opción a quien me trate como prioridad.

Seguiré despertándome con sueño, comiendo sin hambre, riéndome con ganas. Seguiré dando más de lo que recibo, hablando más de lo que callo, soñando más de lo que duermo.

Pediré perdón cada vez que tenga que hacerlo y perdonaré cada vez que me pidan perdón.

Olvidaré. Empezaré de cero.

Cuidaré todos y cada uno de mis tesoros.

No cometeré el error de no caer en el error.

Escribiré un diario! Mentira, no, eso sé que no lo voy a hacer.

Comeré menos chocolate? Mmmm… tampoco.

Sonreiré siempre. Sí. Eso sí.

Lloraré algo, pero poco, y sólo por eso de limpiar los ojos.

Y sobre todo… No desaprenderé lo que aprendí.





Mi 2012 ha sido… Libélula, sí, esa es la definición más acertada que puedo darle. 
Y lo mejor de todo es que no es un año, es una mentalidad, es una actitud, es… una era.


Feliz Año II de la Era Libélula.
Feliz 2013.












jueves, 27 de diciembre de 2012

Porque 2013... Va-a-molar-mucho!!


De 2012 aprendí que crecer sólo duele al principio, cuando duelen las rodillas, pero que luego ese dolor ya no es malo, no hace tanto daño, y mola..

En 2012 te aprendí, y aprendí a quererte sin quererte. A mirar por ti, a respetarte, a desear que fueras feliz, a no ser egoísta. A quitarme de en medio sólo para no dolerte.

De 2012 aprendí que el vaso siempre está medio lleno y la botella también. Con la nevera no ocurre lo mismo, porque cuando tienes mucha hambre siempre la ves medio vacía, pero eso es otra historia que no va tanto conmigo.

2012 me enseñó que a veces se da más de lo que se recibe, pero también me advirtió de que la culpa no era tuya, sino mía.
En 2012 te estudié mientras dormías y descubrí que no eras lo que quería para mi, que no me dabas lo que necesitaba, que no pensaba conformarme con tu “nada” dosificado. Quizás fui yo, que no supe entenderte. O tú, que no supiste explicarte. Da igual. Ya da igual, porque a veces el fin no justifica los medios, y no se necesita nada que justifique ese fin además de sensaciones.

2012 me advirtió que no debía esperar nada de la gente, y sin embargó sólo encontré cosas buenas, porque las malas las fui soltando por el camino cuando empezaban a pesarme.

2012 me enseñó que soy más fuerte de lo que pienso, más independiente, más feliz, más positiva, y que giro el caleidoscopio mejor de lo que creía..
Con 2012 tomé café de la mano de mis sueños, algunos los cumplí, otros quedaron más cerca.

2012 unió a personas importantes en mi vida con otras personas importantes en las suyas, y nos trajo la ilusión de los que vendrán en 2013.
En 2012 conocí a otra pequeñita familia a la que no tardé nada en querer y de la que ya no quiero deshacerme.

2012 nos alejó en kms, pero nos demostró que nos teníamos cada vez más cerca, como siempre… desde siempre.

En 2012 seguí cruzando sin mirar, tirándome a la piscina, superando barreras y matando miedos. A veces fue difícil. Otras incluso lloré. De vez en cuando di algún grito y en algún momento necesité un buen bofetón.

Y así podría estar tres horas y mil líneas, y quizás no me entendieras ni dieras forma a mis metáforas. No importa. Cada uno seguirá pensando lo que quiera que sea que piensa del mundo, y yo seguiré orgullosa de los que están a mi lado.. de lo que 2012 me regaló, y también de lo que se llevó.





En 2012 CRECÍ… Le eché valor al mundo, me di la vuelta cuando hizo falta y di un salto cuando tuve que hacerlo. Corrí deprisa. Me alejé despacio.. pero me alejé. Cada vez que me lo pidió el cuerpo.


En ti pensé.

A ti te puse límites.

Tú engordaste porque eres un gato mimado que duerme en mis pies.

A vosotras os descuidé en ocasiones porque no llegaba a todo... y os eché de menos.

A ti te apoyé, y creo que lo hice bien.

Tú me hiciste el mejor regalo que podías hacerme.

A ti te añoré, pero nunca fui a contártelo.

A ti, te seguí queriendo.

Contigo descubrí que existe gente con barreras.. y no quise luchar para romperlas.


A ti te odié más de lo que te merecías, te traté mejor de lo que te merecías, te consentí más de lo que te merecías; y cuando me di cuenta de lo que me merecía yo…te mandé a la mierda. Y así, tú me perdiste.


A ti te recuperé.

A ti te quise más de lo que te quería.

A ti me acerqué. De ti me alejé.

A ti creí haberte encontrado al día 3, te definí con la perfección, y me di cuenta de que la imperfecta era yo.

Contigo aprendí de la vida, del amor, de la amistad y de otras muchas cosas más.

A ti te escribí más de lo que ves y te publiqué menos de lo que piensas.

De ti seguí aprendiendo. Y de ti. Y de ti, y también de ti..

Tú seguiste presente, conmigo. Siempre.




Y es que si tengo que describir 2012 en una palabra lo hago con GRANDE. Y no cambio ni uno sólo de los momentos que me ha regalado y que me han traído hasta aquí.



Y ahora que tengo la fórmula sólo puedo decir que 2013 va-a-molar-mucho!! Porque lo mejor está por llegar..
¿Vienes?